El 16 de mayo, Jorge Miguel Armenta Ávalos, propietario y director del periódico «El Tiempo» y de Medios Obson, fue asesinado a balazos por desconocidos cuando salía de un restaurante de comida china, al centro de la ciudad de Obregón, en Sonora, México.
Medios Obson se transmite en Facebook y la mayoría de contenidos son videos que tratan temas policiales y de seguridad. Según los medios locales, Armenta ya tenía amenazas de muerte, así como sus compañeros del medio. De hecho, de acuerdo al diario Universal se transportaba en un auto blindado, custodiado por escoltas.
Cuando ocurrió el asesinato, el director del medio, que también se desempeñaba como productor de radio y televisión, estaba acompañado del policía Rafael Vásquez y el comandante rural Orlando Rubalcaba, quienes también murieron al instante.
La gobernadora de Sonora, Claudia Pavlovich, explicó en su cuenta de Twitter que solicitó a la fiscal, Claudia Indira Contreras, que “inicie de inmediato las investigaciones para esclarecer y dar con los responsables del condenable ataque contra el director de Medios Obson, Jorge Armenta y 2 agentes de la policía municipal”.
Contreras se pronunció respecto al pedido y aseguró a la prensa local que no descartará ninguna línea de investigación para dar con los asesinos. “Seremos muy minuciosos, no descartamos ninguna línea de investigación, abordaremos tanto lo inherente al orden familiar, personal y, por supuesto, las relacionadas al ejercicio profesional de cada una de las personas que fueron víctimas de esta agresión”, recalcó la Fiscal.
Este no es el primer asesinato de un periodista en México. A finales de marzo, la periodista mexicana María Elena Ferral, corresponsal del Diario de Xalapa, fue asesinada en Veracruz.
El 8 enero también se encontró el cuerpo del periodista Fidel Ávila Gómez, locutor de la estación La K Buena en el estado de Michoacán, luego de estar 40 días desaparecido. Mientras que el 8 de abril, la policía mexicana encontró parte del cráneo del director de noticias Punto por Punto, Víctor Fernando Álvarez, en Acapulco. Armenta sería el cuarto periodista asesinado.
Fundamedios condena este asesinato. Hace un llamado a las autoridades para que inicien una investigación inmediata y eviten que un nuevo caso no sea resuelto. La organización se solidariza con los familiares y el gremio mexicano por esta pérdida que, nuevamente, enluta al periodismo.