El periodista de El Clarín, Daniel Santoro, acudió al Tribunal General de Dolores, ubicado a casi 200 kilómetros de Buenos Aires, para rendir su versión respecto a una supuesta participación en un caso de extorsión y espionaje por el que está detenido el falso abogado Marcelo D’ Alessio e imputado el fiscal Carlos Stornelli.
Tras la indagatoria, Santoro explicó a los medios locales que contestó todas las preguntas del Juez. «Yo vine a contar mi verdad, vine a defender mi investigación periodística, a defender el secreto profesional «, aseguró.
Al comunicador se lo acusa de pertenecer, supuestamente, a una organización delictiva y de extorsión. En esta red, Santoro habría intercambiado llamadas telefónicas con D’Alessio para beneficio personal.
Daniel Santoro negó formar parte de esa asociación ilícita. Además, solicitó que se anule el informe con las llamadas entrantes y salientes de su teléfono celular, que le proporcionó la empresa Telefónica, pues están protegidas por el secreto profesional periodístico, garantizado por el artículo 43 de la Constitución Nacional.
Alfredo Zacarías, vicepresidente del Foro de Periodismo Argentino (FOPEA), comentó a FUNDAMEDIOS que la declaración del comunicador duró alrededor de tres horas y media. «Santoro descalificó a D’ Alessio como informante, contestó todo lo que se le preguntó en el Juzgado y se lo veía bastante tranquilo».
Zacarías aseguró que el Juez deberá resolver la situación de Santoro, es decir si lo deja como imputado o dicta sobreseimiento. Tanto FOPEA como otras organizaciones que defienden la libertad de expresión aún temen que el juez obligue al periodista a revelar fuentes e información. El Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ) y Edison Lanza, relator especial para la Libertad de Expresión de la OEA, manifestaron su preocupación por el “principio de la reserva de las fuentes periodísticas”.